Es una sustancia orgánica renovable de origen animal o vegetal, no hay que olvidar que no hace mucho era la fuente más importante de energía, puesto que en ella se basaba la actividad de las manufacturas hasta el comienzo de la revolución industrial. Tras la aparición de los combustibles fósiles el aprovechamiento de este tipo de energía renovable fue disminuyendo de manera paulatina hasta casi su total desaparición.
Su contenido energético proviene de la energía solar captada por los vegetales en el proceso de la fotosíntesis y acumulado en los enlaces de las moléculas orgánicas que los conforman. La utilización de esta energía consiste en aprovechar las materias orgánicas de origen animal, vegetal y los productos derivados del uso del hombre, es decir, reutilizar los residuos sólidos urbanos, residuos agrícolas, forestales, industriales, etc.
El elevado precio actual de los combustibles fósiles, además del conocido perjuicio que suponen para el medio ambiente, mezclado con los continuos avances tecnológicos que se han producido a lo largo de los últimos años, han generado sistemas que cada vez son más eficientes y sobre todo limpios, de modo que la conocida como bioenergía está tomando cada vez mayor importancia y presentándose cada vez más como una posible alternativa al hasta ahora uso generalizado de combustibles fósiles.
Entendemos como biomasa natural a aquella que proviene de un proceso de transformación previo, por ejemplo la leña obtenida directamente del tronco de los arboles utilizada para generar calor, frío o electricidad, la podemos encontrar en diferentes estados:
- Sólido: pellets, briquetas o astillas
- Líquido: biodiesel o bioetanol.
- Gaseoso: biogás.
En la actualidad podemos encontrar sistemas de biomasa residual seca, entendiéndola como la proveniente de los procesos forestales y los residuos de las industrias de transformación de la madera, en su aplicación a la edificación, como calderas o estufas de pellets. Se suelen colocar en serie, es decir, de forma paralela utilizando el número que sea necesario según la demanda energética de la edificación. Los denominados pellets son virutas de madera compactada, también se utilizan astillas de madera, huesos de aceitunas o leña siendo las materias primas más comunes que utilizan estos sistemas. Este tipo de maderas suelen obtenerse, de plantas como el sauce o álamo que son árboles de rotación corta.
Sin embargo, se pueden utilizar como combustibles derivados de cereales, materiales como la cascara de los cereales, paja, son materias primas en forma sólida, pero también podemos encontrar aceites como el de girasol que se convierten en biodiesel, además se puede obtener en forma gaseosa o biogás, utilizando estiércol liquido en combinación con cereales por ejemplo el maíz.
Imagen: Caldera de astillas de madera, pellets y hueso de aceituna KWB. Fuente: kwb.es
El hecho de que se utilicen subproductos es la clave del crecimiento que está sufriendo este tipo de sistemas en el presente más inmediato, supone un aprovechamiento máximo de los recursos. Un ejemplo que nos permite apreciar con más claridad este aprovechamiento total es el uso del hueso de aceituna como fuente de energía, actualmente se están desarrollando un proyecto de investigación para el desarrollo de procesos avanzados de fraccionamiento y conversión biológica para la obtención de energía y productos químicos a partir de la poda de olivo presentado en la última “Biomass Conference and Exhibition”, con lo que se alcanzaría aun más el objetivo de aprovechamiento completo en la manufactura de la oliva.
Hay que prestar especial interés al tratamiento posterior de las cenizas originadas tras el proceso de combustión, actualmente se pueden utilizar como relleno de materiales cerámicos o como aditivo en la fabricación de cementos, investigadores de la Universidad de Navarra están realizando estudios para su aplicación incluso como fertilizantes.
La Biomasa es compatible con:
- Solar térmica (dimensionada para ACS), la caldera cubriría la calefacción.
- Fotovoltaica.
- Eólica.
- Geotermia. La caldera cubriría ACS y parte de la calefacción. La geotermia cubriría el resto de la calefacción. Este caso es incompatible con paneles térmicos.
- Enfriadora por absorción (frio solar). La caldera cubriría la calefacción. Los paneles térmicos cubren ACS y aportan calor a la enfriadora.
- Cogeneración. La cogeneración cubre el ACS. La caldera cubre el resto de la calefacción.
La biomasa no es totalmente incompatible con ninguna tecnología. Es probable que requiera caldera auxiliar tradicional por posibles contingencias. Es muy importante prever bien el espacio para entrega, almacenaje de combustible así como la retirada de las cenizas.